Sean juventud. Vivan la juventud,
contaminen de juventud a la
familia, a la Iglesia, a la sociedad.
No cedan al desencanto, no
caduquen…
Sean cristianos y cristianas en
el seguimiento de Jesús.
Aquel de Belén, de las
Bienaventuranzas, del Calvario y de la Resurrección
Cuya característica esencial de
ese seguimiento es la opción por los pobres.
Sean juventud de nuestra América,
asumiendo los desafíos
Y las posibilidades que ustedes
tienen
Con espíritu crítico, no
separando la fe verdaderamente evangélica
De la política socializadora,
Una Nueva Patria Grande y una
nueva Iglesia nuestra, ecuménica,
Solidaria, plural, sin posibles y
necesarias.
Vivan, vivamos la militancia
estimulados
por el testimonio de tantos
mártires nuestros y siempre
vivamos el misterios de Pascua
con la utopia del Reino.¨
Monseñor Pedro Casaldáliga
A los participantes del III
Congreso Latinoamericano de Jóvenes
Los Treques, Venezuela, 2010
El
presente documento es un esfuerzo de reflexión colectiva sobre la opción
preferencial por los jóvenes dentro del marco del proceso de revitalización de la Pastoral Juvenil
Latinoamericana , los 30 años de Puebla y 25 años del Año
Internacional de la Juventud
que esperamos sirva como un aporte en la reflexión que nos exige el tiempo
presente.
Introducción
La
pastoral juvenil latinoamericana nos ha colocado en éste proceso de reflexión
con la convocatoria del III Congreso Latinoamericano de Jóvenes[1] (setiembre del 2010). Los
Congresos Latinoamericanos de la Pastoral Juvenil son espacios de
representatividad y orientación sobre los grandes desafíos y líneas de acción que
la pastoral juvenil en el continente debe asumir de cara a responder a las
exigencias de la realidad juvenil. En ese sentido se genera todo un proceso de discusión, debate y
reflexión rica y desafiante, previa, durante y postcongreso.
Llegar
a definir, con una metodología de consenso, los principales desafío y líneas de
acción para la pastoral juvenil latinoamericana constituyen sin duda un
acercamiento sustantivo[2] a las realidades del
continente por los aspectos comunes que se reconocen en las realidades, las
priorizaciones que se hacen y en ese sentido son un fiel reflejo de aquello que
acontece en cada uno de nuestros países y en continente en su conjunto.
Entre
Cochabamba (Bolivia 1992), Punta de Tralca (Chile 1998) y Los Teques (Venezuela
2010), se han dado una serie de líneas de acción como respuesta a los desafíos
reconocidos como exigencia para la acción pastoral del continente. Los países
asumen según sus procesos, operativizar estas líneas con programas, proyectos y
actividades, desatando de alguna manera en una perspectiva de feek baak, una
retroalimentación del proceso latinoamericano cuando experiencias concretas
surgen como modelos sugerentes de respuestas a realidades concretas, o
ensanchan la reflexión sobre temáticas emergentes en la realidad
latinoamericana. Es así como se fueron gestando las dos (02) versiones de las
orientaciones latinoamericanas de pastoral juvenil: Pastoral Juvenil. Si a la Civilización del Amor (1987) y Civilización del Amor Tarea y Esperanza
(1995).
Este
proceso de reflexión no pierde de vista el contexto latinoamericano, que se
ubica como telón de fondo para comprender los procesos de país en las
dimensiones eclesial y social, como cultural y política. Uno de los criterios
que la pastoral juvenil asume es su contextualización, es decir, que su
reflexión parte de su realidad, sus procesos hacen referencia a los procesos
sociales y políticos. En el trabajo de la pastoral juvenil el horizonte
sociopolítico lo coloca las políticas de juventud.
Las
ideas que a continuación se presentan surgen de esa lectura del proceso
histórico de la pastoral juvenil del continente, los aportes previos que los
países han hecho durante este tiempo previo, como los resultados que nos
entregan lo acontecido en el espacio latinoamericano.
Quisimos
también sostener este documento con el aporte de los diversos actores que
mantienen un trabajo directo con las pastorales juveniles en nuestro país como
en América Latina. Así hemos tenido diversas conversaciones, reuniones de trabajo
análisis y reflexión. Aquí unas primeras reflexiones.
1. El III Congreso
Latinoamericano de Jóvenes en el contexto de la Opción Preferencial
por los Jóvenes
Este
III congreso ha significado la continuidad del trabajo de la pastoral juvenil
latinoamericana después de 12 años, tiempo en el que se han dado los 50 años
del CELAM y la restructuración organizativa tenida, que sobrecargo la labor de
los secretarios ejecutivos y por ello limitó por unos años el encaminamiento de
la pastoral juvenil latinoamericana. Ello se ha notado con un alargamiento de
los encuentros y procesos que venían siendo más activos y dinámicos.
Se
desarrolla luego de Aparecida en donde los obispos han reafirmado la opción por
los jóvenes y con ello marcando una línea orientadora del quehacer de la
Iglesia latinoamericana (Puebla 1186, Santo Domingo 114 y Aparecida 446) durante estos últimos 30 años.
Con ello, también ha colocado el horizonte de acción de la pastoral juvenil
latinoamericana para los próximos años. Es decir nos toca responder ¿Cuál es el
significado que tiene la opción preferencial por los jóvenes, para el presente
y futuro de la pastoral juvenil y de la Iglesia? Esta es sin duda una de las
preguntas que pueden orientar nuestras reflexiones de cara los siguientes años.
La reflexión teológica y bíblica sobre los jóvenes que se ha ido incrementando[3] nos presenta nuevas luces en
este camino. De igual forma la preocupación que muestran los obispos sobre el
tema nos permiten estructurar, actualizar y agudizar nuestras reflexiones.
Veamos en América Latina sólo dos ejemplos en este sentido: el documento del
episcopado peruano Jóvenes Cristo los
Ama, Cristo los Llama, Cristo los envía de 1992 y el documento sobre
juventud del episcopado brasileño Evangelização da Juventude del año 2007.
La
línea de acción N° 3 reclama el trabajo de ¨una pastoral que priorice el protagonismo del
joven, acogiendo, reconociendo, como
espacio teológico¨ (Los Teques 2010). Refleja sin duda, esa necesidad de
seguir profundizando en la reflexión teológica sobre los jóvenes. Una tarea
pendiente para los teólogos que acompañan a las juventudes de nuestro
continente. Un esfuerzo en ese sentido constituye la Red Latinoamericana de Teólogos, que recientemente el CELAM ha conformado y empezado
una dinámica interesante de reflexión, intercambio y producción.
Un
hecho que tiene real significancia para la pastoral juvenil del continente es
la entrega a los países y participantes de éste congreso del ¨Anillo de Tucum¨,
símbolo de la ¨Iglesia
de los pobres¨, del compromiso en la opción preferencial por los pobres. Se
explica con un texto a los participantes, durante la entrega dentro de una
celebración intensa: ¨Mucha gente se pregunta ¿Cuál es el significado del
anillo negro, usado por los que siguen una espiritualidad liberadora. Como los
miembros de la Pastoral de Juventud del Brasil. Algunos la usan sólo para las
miradas, sin conocer ni preocuparse por su significado real. El anillo de tucum
es un símbolo usado por los/las que creen en el compromiso de las iglesias
preferencial a los pobres. El objetivo es redimir esta promesa y el informe de
las causas de la
pobreza. Este compromiso esta simbolizada en esta alianza, ya
que el Antiguo Testamento los profetas y los apóstoles afirman tanto la
fidelidad de Dios a los pobres y oprimidos. Tucum, la alianza es una señal de
lealtad, de compromiso. En la Biblia, la opción por los pobres es y también
testigo de toda la tradición de la iglesia, especialmente en América Latina,
desde el Concilio Vaticano II y de las Conferencias de obispos en Puebla y
Medellín. Esta opción no es sólo una responsabilidad individual. En este
momento en la historia, implica un compromiso social que está conectado a la
distribución y el acceso a la propiedad de los bienes absolutamente necesarios
para la vida. Dios
está con los pobres, porque Dios ama a los pobres. Por lo tanto, los cristianos
están llamados a seguir este mismo ejemplo de amor y opción preferencial, que
intenta promover la dignidad humana. En los pobres revela el rostro de Dios
mismo (Mateo 25,40)¨. Continua el texto con una indicación y al mismo tiempo
revelación de su hondura: ¨En la película ¨Anillo de Tucum¨, Monseñor Pedro
Casaldáliga explica así el significado de esta alianza: ¨(…) Este anillo se
hace desde una palmera amazónica. Es un signo de la alianza con la causa indígena
y con las causas populares. ¿Quién lleva el anillo ello significa que tuvieron
estas causas. Y sus consecuencias. Usted iría a usar el anillo? Mira lo que
compromete, ¿ves? Muchos, a causa de este compromiso fueron a la muerte (…)¨
¿Usted iría a usar el anillo?¨. Pregunta contundente e histórica que cuestiona
nuestros compromisos y que exige respuestas comprometidas.
2. El proyecto de revitalización
El Proyecto de Revitalización de la Pastoral Juvenil
Latinoamericana , ¨La vida de los y las jóvenes, un camino de
discipulado y misión¨ está concebido en cuatro (04) etapas. Estas son: 1.
Fascinar; 2. Escuchar; 3. Discernir y 4. Convertir. El III congreso cerró la
etapa del discernir y hemos entrado a la etapa del convertir.
Esta
última etapa del CONVERTIR busca ¨Construir un camino, a partir del 3er
Congreso y de la propuesta de Civilización del Amor, e implementar una acción
pastoral que genere un nuevo movimiento que garantice la vida de las juventudes
como discípulos del Resucitado para salir a anunciar la Buena Noticia a
los pueblos.¨ (documento momento del convertir).
Este
proceso está en sintonía con la Gran Misión Continental
en la que nos encontramos. En ese sentido ¨la misión de la Pastoral Juvenil
es identificar en el continente americano toda y cualquier amenaza a la vida de
los y las jóvenes, de forma especial, de los pobres, para que la Buena Nueva del
Resucitado sea conocida y vivenciada, y sus vidas transformadas.¨ (documento
momento del convertir).
Se
ha propuesto un derrotero bíblico y pastoral para la etapa del CONVERTIR en los
siguientes años. Así:
2011: Belén: Convertir/Construir
2012: Nazaret: Conmover/Cuidar
2013: Betania: Vivenciar/Saborear
2014: Samaria: Reconocer/convivir
2015: Jerusalén: Generar/Celebrar
Los
países se han ido ubicando en este proceso consciente también de su propio
proceso pastoral, en el que se han reconocido en varias ocasiones cierto
desfase con la memoria histórica por el natural movilidad de los liderazgos, los
cambios en las responsabilidades pastorales, como la necesidad de asumir
exactamente lo que supone la ¨revitalización¨ en el propio proceso
pastoral.
El
año 2015 se evaluará en el mundo el cumplimiento de los Objetivos de Desarrollo
del Milenio. Muy buena oportunidad para medir también cuanto de
¨revitalización¨ se generado en la pastoral juvenil de nuestros países. El
documento de Aparecida (DA 65) nos invita a mirar los nuevos rostros de los
jóvenes: ¨Esto nos debería llevar a contemplar los rostros de quienes sufren.
Entre ellos (…) jóvenes, que reciben una educación de baja calidad y no tienen
oportunidades de progresar en sus estudios ni de entrar en el mercado del
trabajo para desarrollarse y constituir una familia; muchos pobres, desempleados,
migrantes, desplazados, campesinos sin tierra, quienes buscan sobrevivir en la
economía informal¨. Por lo tanto, un indicador de esta ¨revitalizacion¨ puede
ser aquel que nos diga ¿Cuánto la Pastoral Juvenil en nuestros países han
contribuido a disminuir las condiciones de pobreza de los diversos rostros de
jóvenes? ¿En qué medida esos diversos rostros son parte de nuestra atención
pastoral?
3. Los desafíos y líneas de
acción para la pastoral juvenil del continente
Una
mirada panorámica sobre los desafíos y líneas de acción de los tres (03)
Congresos Latinoamericanos de Jóvenes realizados hasta la fecha nos permiten encontrar por un lado, ejes
estructurantes de la realidad sociopastoral a la que la Pastoral Juvenil
del continente quiere responder y que marcan su proceso en éstos 35 años que
lleva la animación de la Pastoral Juvenil
Latinoamericana. Aún cuando éste último congreso (Los Teques
2010) no haya arribado, como en los anteriores congresos, hacia líneas de acción,
¨los horizontes¨ señalados al final del proceso de reflexión, marcan sin duda
los derroteros de nuestra acción pastoral para el futuro de la Pastoral Juvenil
en el continente.
La
ruta señalada como horizonte temporal hacia el cual ha de revisar la pastoral
juvenil este proceso de revitalización es el año 2015, año en que se han
señalado también la revisión de los Objetivos Del Milenio (ODM). Coincidencia
que nos coloca quizás una gran oportunidad para revisar la acción pastoral en
relación a ¿Cómo la pastoral juvenil que busca anunciar el evangelio a los y
las jóvenes es sin duda esa buena noticia que da vida plena a las juventudes de
nuestros países? De que manera la pastoral juvenil, siendo consciente de su
tarea educativa, es capaz de enfrentar las condiciones de empobrecimiento de
las juventudes latinoamericanas? ¿Cuál es el rol y la tarea de la Pastoral Juvenil
para hacer que los y las jóvenes tengan vida y vida en abundancia (Jn 10,10)?.
La
tarea educativa que la pastoral juvenil desarrolla constituye una enorme
oportunidad para afrontar las enormes situaciones críticas que viven los y las
jóvenes. La CEPAL[4] señala en ese sentido que «La educación es un eje clave del desarrollo.
Gracias a ella es posible mejorar las condiciones sociales, económicas y
culturales de los países. El aumento de los niveles educativos de la población
se asocia al mejoramiento de otros factores clave de desarrollo y bienestar,
como la productividad, la movilidad social, la reducción de la pobreza, la
construcción de la
ciudadanía y la identidad social y, en
definitiva, el fortalecimiento de la cohesión social.¨
Hay
temas ¨persistentes¨ y otros ¨emergentes¨ que aparecen en el proceso de
reflexión de la Pastoral Juvenil Latinoamericana. Aún cuando el
III Congreso Latinoamericano de Jóvenes haya cumplido con su cometido,
consideramos que no se han dado las oportunidades necesarias para que estos
temas encuentren socialización, discusión, reflexión y formen parte de las
temáticas urgentes para la
Pastoral Juvenil del continente.
A
continuación señalamos los núcleos temáticos de las líneas de acción de los
tres (03) congresos y luego algunas reflexiones sobre los temas ¨persistentes¨
y ¨emergentes¨.
COCHABAMABA
1992
|
PUNTA DE
TRALCA
1998
|
LOS TEQUES
2010
|
1. Promover e impulsar procesos
de formación integral crítica
y liberadora.
|
1. Impulsar la articulación y la formación de los
jóvenes que se encuentran en los ambientes
específicos.
|
1. Impulsar y
fortalecer una Pastoral Juvenil
Orgánica.
|
2. Promover y apoyar orgánicamente las
experiencias comunitarias de Pastoral Juvenil de medios específicos.
|
2. Fortalecer la conciencia crítica de los jóvenes.
|
2. Propiciar
una Pastoral Juvenil con Procesos de
Formación Integral.
|
3. Asumir y reafirmar
efectivamente la opción preferencial por los pobres y los jóvenes.
|
3. Asumir responsable y coherentemente la opción
preferencial por los jóvenes y los pobres.
|
3. Impulsar
desde los procesos de Pastoral Juvenil un Proyecto de Juventud.
|
4. Incentivar la formación
integral de asesores.
|
4. Generar e impulsar urgentemente proyectos
de autofinanciamiento económico.
|
4. Fortalecer el
acompañamiento a través de
procesos de formación integral.
|
5. Promover la educación popular crítica y liberadora.
|
5.
Promover en lo jóvenes y las jóvenes los
valores de la familia desde una visión cristiana.
|
5. Impulsar un proceso de revitalización de
|
6. Articular y fortalecer las
diversas experiencias de la pastoral
juvenil, sistematizándolas
y profundizando en el método ver, juzgar, actuar, revisar y celebrar.
|
6. Promover y afirmar espacios donde se puedan celebrar, vivenciar y encarnar personal y
comunitariamente la espiritualidad del seguimiento de Jesús desde la propia
realidad del joven.
|
6.
Ser una Pastoral Juvenil
organizada y sustentada en la memoria
histórica.
|
7. Impulsar procesos de participación activa y
democrática de los jóvenes en la
Pastoral juvenil y en la sociedad.
|
7. Formar y acompañar a los y las jóvenes en el
interés y la participación
en los procesos políticos.
|
7. Reorientar procesos de Pastoral
Juvenil que salgan al encuentro de los jóvenes.
|
8. Articular e impulsar la coordinación
representativa de
|
8. Crear
procesos de elección de asesores de Pastoral Juvenil.
|
8.
Formar jóvenes en el sentido crítico.
|
9. Concientizar
al joven sobre la realidad de América
Latina.
|
9.
Concientizar a los jóvenes de su papel
protagónico dentro de los ministerios laicales y los diversos ambientes
de la sociedad.
|
9.
Promover espacios e itinerarios de formación constantes que propicien el
discipulado misionero.
|
10. Incentivar y promover la coordinación de centros de
formación.
|
10. Desarrollar procesos de educación en la percepción
crítica y en la utilización de los medios de comunicación social.
|
10. Fortalecer
una PJ que priorice el protagonismo del
joven, acogiendo, reconociendo, como
espacio teológico
|
11.
Revitalizar
|
||
12. Revisar y replantear
|
Desde
una mirada general podemos reconocer las temáticas señaladas como aún vigentes
para su atención en este tiempo. Nos gustaría en ese sentido analizar,
considerando las ideas señaladas en el XVI Encuentro Latinoamericano de
Responsables Nacionales de Pastoral Juvenil realizado en Cochabamba en octubre
del 2009 al que tuvimos oportunidad de participar en representación de la Red Latinoamericana
de Centros e Institutos de Pastoral Juvenil.
La renovada opción preferencial
por los jóvenes
Un
primer aspecto que nos invita a la reflexión es la línea que plantea la opción
preferencial por los jóvenes. Esta es a nuestra consideración una línea eje y
estructurante del conjunto, pues se ha mantenido en la conciencia de la
pastoral juvenil latinoamericana y sigue presente desde la reafirmación
que se hace en Aparecida (DA 446).
En
ese sentido creemos que se viene avanzando desde la perspectiva bíblica y
teológica con nuevos aportes que van iluminando los sustentos que dan a la
acción pastoral con jóvenes. Sin embargo, debe aún exigirnos mas la producción
en la reflexión teológica sobre el sentido de las juventudes en
la economía de la salvación y con ello iluminar, sustentar y orientar
nuestra acción pastoral como una opción de la Iglesia por los jóvenes.
La reconexión necesaria con el proceso histórico
Una
preocupación latente en el congreso de Venezuela ha sido sin duda la
desconexión con el proceso histórico de la Pastoral Juvenil.
La pastoral juvenil esta nutrida por jóvenes que pasan por el
proceso, lo cual quiere decir que siempre hay jóvenes nuevos, que tienen en
estos espacios la oportunidad para reconocer esa dimensión latinoamericana de la propuesta. Pasa lo
mismo en los procesos nacionales y por ello existe la exigencia para las
comisiones nacionales, como de la Sección de Juventud del CELAM de brindar
oportunidades para la formación en las líneas orientadoras de la pastoral
juvenil latinoamericana, de manera continua y permanente. Sin embargo, esa es
una tarea a veces difícil, mucho más cuando los procesos se ven cortados y/o
limitados por los cambios en la asesoría y dirección de las pastorales
juveniles.
Esta
constatación se vio reflejada en el ejercicio con los congresistas que realizó
el P. Hilario Dicks,[5]sacerdote jesuita brasilero
de amplia experiencia: ¨El expositor indicó que en éste congreso está reunida
la parte más significativa de la pastoral juvenil de América Latina. Planteó
como interrogante inicial ¿A qué distancia estoy yo de esta historia? Refiere
que él forma parte de esta historia, la conoce, la pelea. Afirma que la
historia es una belleza que se expresa en la única variedad de experiencias que
aquí los jóvenes presentan. Hace referencias a la memoria histórica. ¨Quién no
tiene memoria, no tiene columna vertebral¨ y advierte sobre el riesgo de
olvidar la historia. Luego pregunta al auditorio quienes han leído ¨Civilización
del Amor. Tarea y Esperanza¨ e invita a éstos a que se pongan de pie. Luego,
hace los mismos con quienes no lo han leído aún. A partir de ello, plantea el
interrogante de qué es lo que nos proponemos revitalizar, qué es lo que vamos a
revitalizar si ¨Civilización del Amor¨ no es conocida por cada uno.¨
La
pregunta es obligatoria: ¿Cómo es posible revitalizar algo que se desconoce?
Para el caso del Perú podríamos decirnos la misma pregunta ¿Qué proceso de
revitalización se va a generar sin consideraciones de los marcos referenciales[6] e históricos de la pastoral
juvenil peruana? Ciertamente, este esfuerzo por el proceso de revitalización
debe desencadenar al mismo tiempo un jaloneo a revisar la memoria histórica en
los procesos de nuestros países.
La asesoría en la pastoral
juvenil
Los
asesores de pastoral juvenil vuelven a ser centro de nuestra preocupación.
La línea referida a los asesores(as) que fue votada por aclamación en Punta de Tralca (Chile 1998), consideramos que es una de las más importantes en este proceso de la pastoral juvenil y que esta íntimamente relacionada con la opción preferencial por los jóvenes. La forma de asumir esta opción supone sin duda, una responsabilidad cuando se designan a los encargados de construirla Iglesia Joven. Por
eso, se habla de la ¨ministerialidad de la asesoría¨ (Civilización del
amor Tarea y Esperanza, 1995). Cuando nos interesamos un poco por analizar
la identidad del asesor(a) debemos considerar que evidentemente el
estado de vida constituye, además de otros aspectos, el núcleo de sus
potencialidades y problemáticas. No es lo mismo el asesor(a) si es sacerdote
(diocesano o religioso), o religios(a), o
laicos.
La línea referida a los asesores(as) que fue votada por aclamación en Punta de Tralca (Chile 1998), consideramos que es una de las más importantes en este proceso de la pastoral juvenil y que esta íntimamente relacionada con la opción preferencial por los jóvenes. La forma de asumir esta opción supone sin duda, una responsabilidad cuando se designan a los encargados de construir
Esta
ha sido una preocupación que se ha mantenido durante los tres (03) congresos.
Se hizo evidente en Cochabamba (Bolivia 1992) cuando se afirma la necesidad
de ¨Incentivar la formación integral de
asesores¨ (Línea de acción No 4). Se expresa con enorme preocupación en los
Teques (Chile, 1998) la idea de ¨Crear procesos de elección de asesores de Pastoral Juvenil¨ (Línea
de acción No 8) y se expresa también en
Los Teques (Venezuela 2010), cuando se señala: ¨Fortalecer el
acompañamiento a través de procesos de formación integral¨ (línea de acción No
13). Sin duda, razones fuertes para asumir tareas respecto a la elección,
formación y acompañamiento de asesores de pastoral juvenil.
La reflexión teológica sobre
juventud
La pastoral
juvenil requiere, como hemos señalado anteriormente, de una mayor reflexión
bíblica y teológica sobre la juventud, que nutra nuestras reflexiones y
acciones pastorales. Este tema aparece como emergente, pues se señala como una
de las líneas de acción: ¨Fortalecer
una Pastoral Juvenil que priorice el protagonismo del joven, acogiendo, reconociendo, como espacio teológico (línea No 3).
Considerar que el joven, la
joven, los jóvenes, las juventudes son un ¨lugar teologico¨, supone lugar de
revelación. Dios se revela en los jóvenes a la humanidad. Señala Dicks[7]
(1997:5): ¨El joven es una realidad biológica, esto es, un ser vivo, de cierta
edad, con sus relaciones, una realidad sociológica en cuanto se circunscribe en
la realidad ¨social¨, inclusive como fenómeno; una realidad antropológica,
cultural y psicológica. ¿Por qué el joven no puede ser, igualmente, una
realidad teológica? ¿El no es, antes que todo, una realidad ¨divina¨? No es
pieguismo, es un asunto fundamental para quien trabaja con el joven¨.
La atención a la diversidad de
rostros juveniles
Otro
tema que encuentra sintonía con las orientaciones en Aparecida cuando nos habla
de la ¨diversidad de rostros juveniles¨ (DA) es el referido a las pastorales
específicas de juventud las que nos van a permitir acercarnos a esa diversidad
de mundos juveniles. La atención a las juventudes en los medios específicos es
un tema que aún requiere desatarse con mayor perspectiva. Especialmente desde
la exigencia que plantea las diversas culturas juveniles que se acentúan en ese
proceso de diferenciación que hacen en la sociedad cada vez más adulta y
que sólo reprime, desconfía y castiga. Los países van avanzando con sus
diversas experiencias y toca avanzar en los marcos orientadores, como en las
propuestas pedagógicas que supone una atención desde la diversidad.
La emergencia del mundo
adolescente
El
mundo adolescente irrumpe en la reflexión pastoral. Aún cuando no aparece en
las líneas de acción de los tres (03) congresos, si existe consciencia de ello
y se expresa en la voz de los obispos desde Santo Domingo (N° 115) hasta
Aparecida (442). Es Aparecida que da cuenta con mayor realce de ésta realidad
diferenciada del mundo de los jóvenes: ¨Merece especial atención la etapa de la adolescencia. Los
adolescentes no son niños ni son jóvenes. Están en la edad de la búsqueda de su
propia identidad, de independencia frente a sus padres, de descubrimiento del
grupo. En esta edad, fácilmente puede ser víctimas de falsos líderes
constituyendo pandillas. Es necesario impulsar la pastoral de los adolescentes,
con sus propias características, que garantice su perseverancia y el
crecimiento en la fe .El adolescente busca una experiencia de amistad con
Jesús.¨ Textos iluminadores que encontramos para la realidad de nuestras
pastorales cargadas de presencia de jóvenes cada vez mas jóvenes.
Que
no aparezca dentro de las líneas de acción pastoral en el continente
ciertamente debe decirnos algo. Y esto supone ese esfuerzo desde la pastoral
juvenil por extender la mirada hacia atrás y reconocer la presencia de este
segmento, como la exigencia de pensar una propuesta de acompañamiento. Sin
embargo, varios esfuerzos están en marcha en relación atender de manera
pastoral este segmento desde la pastoral juvenil, que parece en los ámbitos
pastorales y no encuentra una respuesta adecuado al proceso que les toca vivir.
Por eso en algún momento se ha señalado ésta etapa como ¨tierra de nadie¨ en
los ámbitos pastorales. Aun cuando no aparezca con mayor precisión entre las
líneas orientadoras, atender al mundo adolescente debe ser una preocupación de
nuestro tiempo.
El horizonte de las políticas
públicas de juventud
En
América Latina las políticas públicas de juventud son un asunto de gran
importancia (Rodríguez, 2010), especialmente en este año que celebración los 25
años del Año Internacional de la Juventud (1985), en que revisamos cuanto se ha
avanzado en este sentido. Hemos visto durante los últimos años una mayor
preocupación de los Estados por establecer las normas y entidades
gubernamentales que desarrollen políticas públicas de juventud. Sin embargo,
aún hay Estados que no se han logrado desarrollar este sector.
En
este sentido resulta relevante la preocupación de la pastoral juvenil
latinoamericana de reflexionar en torno a la responsabilidad que la pastoral
juvenil debe tener en estos temas. Así lo demuestra el comunicado del congreso.
Señala: ¨la ausencia de políticas públicas de juventud que garanticen los
derechos de los y las jóvenes los conducen a los circuitos violentos de las
pequeñas y grandes ciudades, como víctimas o autores del trafico de drogas y
robos menores, muchas veces influenciado por los medios de comunicación, que lo
llevan a un deseo de consumo exacerbado e innecesario¨.
El
trabajo pastoral con los jóvenes no debe limitarse al horizonte de nuestra
acción eclesial, sino abrirse a la responsabilidad del Estado en la atención de
sectores vulnerables y al mismo tiempo estratégico como lo es la juventud. En esta
misma línea está el aporte que la pastoral juvenil como tejido orgánico puede
aportar al fortalecimiento del ¨Tejido Social Joven¨[8]
en cada una de nuestras sociedades.
La participación social y
política
Una preocupación resaltante en Punta de Tralca que venía ya desde Cochabamba es la participación de los jóvenes en los procesos democráticos y los asuntos públicos. En Chile con la Revolución de los Pingüinos, en Venezuela con la resistencia de los jóvenes universitarios antes las arremetidas de Hugo Chávez tenemos dos ejemplos de la fuerza de los adolescentes y jóvenes que incentivan el cambio y muestran su preocupación por la cosa pública. Eso nos hace pensar en los procesos que se han venido dando en nuestros países en relación a las políticas públicas de juventud.
Hoy
en día la legislación en materia de políticas de juventud esta avanzando varios
países ya cuentan con leyes y normas orientadas a la visibilidad de las
juventudes. En algunos se considera el tejido social joven como un desafío que
debe fortalecerse desde el Estado. Me contaba Carmen Lucia Texeira
del Brasil el esfuerzo que significó para la pastoral juvenil del Brasil
insistir en la temática de Día Nacional de la Juventud y las políticas públicas
de Juventud. Actualmente la
Pastoral Juvenil tiene un lugar ganado en la representación
de la Secretaria
Nacional de la Juventud del Brasil. Este desafío se ha
mantenido latente en las reflexiones surgidas en el último Encuentro
Latinoamericano de Responsables Nacionales de Pastoral Juvenil.
Sintomáticamente la reflexión del último encuentro de la Red de Centros e Institutos
en Perú ha sido por esa línea.
El autofinanciamiento de la
pastoral juvenil
En Punta de Tralca (1998) la línea referida al autofinanciamiento de la pastoral juvenil fue una de las más aplaudidas. Ya Santo Domingo había señalado la necesidad de mejorar las condiciones del trabajo pastoral cuando señala una ¨pastoral juvenil no sólo afectiva sino también efectiva¨ (SD 114). Este tiempo que nos habla de los emprendimientos como estrategia para salir de la pobreza, es sin duda un camino a afianzarse todavía en el trabajo de la pastoral juvenil. Eso habla de la dimensión de promoción[9] que tiene la pastoral juvenil.
Los centros especializados de formación
Una línea que ha sido bastante desarrollada durante estos años es la que el congreso de Cochabamba señalaba en relación a los centros de formación: ¨Incentivar y promover la coordinación de centros de formación¨ (línea de acción N°10). Vemos hoy en día crecer
Los
centros e institutos van generando diversas ofertas formativas y atienden a los
agentes pastorales en cada uno de sus países y/o región. Mantiene actualizada
la reflexión sociopastoral de las juventudes y desarrollan propuestas
pedagógicas, sustentadas en esfuerzos de investigación. Hasta la fecha en sus
20 años, los encuentros bianualaes han jaloneado la reflexión según la
sensibilidad que esta ha tenido respecto de las juventudes y la atención
pastoral en el continente. Sin embargo, consideramos que aún queda para la Red
un camino por andar, considerando la posibilidad de ofrecer una reflexión más
amplia, sostenida y permanente, pensando en lo geográfico con esfuerzos
regionales de reflexión y de investigación y publicación conjunta, desde lo temático
con estudios permanentes, comparativos y atendiendo esas realidades emergentes
que la pastoral juvenil latinoamericana ha señalado. Igualmente pensando en la
actualización permanente y seguimiento de estas temáticas la figura de los
observatorios de juventud son sin duda un modelo sugerente. Estas ideas recogen
las reflexiones que vamos teniendo en este caminar como red.
5. Perspectivas futuras
El
proceso de ¨Revitalización de la Pastora Juvenil ¨ supone sin duda un momento para
repensar, remirar el proceso tenido, a la luz de los enormes desafíos que la
realidad que envuelve a los jóvenes nos presenta. Esto supone sin duda una
primera cuestión y es preguntarnos ¿en qué momentos estamos en la pastoral
juvenil? ¿Cuál es nuestro legado histórico? ¿Cómo estamos atendiendo a las
juventudes en este tiempo? Supone también a partir de estas preguntas,
cuestionarnos sobre ¿Cuáles son los aspectos vacíos y por qué no decir errores
que se han dado en el proceso? Y finalmente señalar las rutas de la revitalización.
Fortalecer aquello que aún está débil, inaugura aquello que
no aún no se ha empezado, desterrar aquello que no nos da resultado.
En
un contexto de mayor complejidad en el que los jóvenes expresan desde sus
culturas y subculturas diversas formas de vida, rostros, historias, nuestra
respuesta ha de ser respetuosa, especializada y permanente. Teniendo en el
imaginario las metas de los objetivos del milenio y los bicentenarios en
nuestros países, toca a la pastoral juvenil responder seriamente sobre estos
temas que emergen como necesidades de atención urgente en el tiempo. Como
señalaba el P. Hugo Echegaray nos toca ¨apurar la historia¨ para que los
jóvenes puedan tener vida y vida en abundancia, como se merecen.
La
reflexión sobre las pedagogías que requiere la atención de las nuevas culturas
juveniles es un tema que urge y debe acompañar nuestros esfuerzos en el
presente y futuro. Precisamente el
próximo encuentro de la Red latinoamericana de Centros e Institutos de pastoral
Juvenil a realizarse en el Salvador en setiembre del 2011 lleva como tema: ¨Métodos
de Evangelización en la Pastoral Juvenil frente a las nuevas culturas juveniles,
30 años después de la opción preferencial por los jóvenes¨. Es en ese sentido
que consideramos que habría que seguir profundizando.
Esperamos
que éstos desafíos y líneas de acción para la pastoral juvenil
latinoamericana se difundan, reflexionen
e inspiren nuevas acciones de trabajo pastoral con los y las jóvenes,
encaminándose en el marco de la opción preferencial por los jóvenes a
revitalizar la hermosa experiencia de la pastoral juvenil.
Bibliografía
CASTILLO, Carlos
2009 La opción por los
jóvenes en Aparecida. Lima, Instituto Bartolomé de la Casas, Centro de Estudios y
Publicaciones , Instituto de Pastoral y Desarrollo Juvenil.
CASTILLO,
Carlos
2009 Joven, a ti te digo, ¡levántate!
Perspectivas sobre los jóvenes en el Nuevo Testamento. CEP, IPADEJ, IBC.
Segunda edición actualizada.
CASAS, Julio
2001 Regeneración moral del Perú. Jóvenes, ética y
ciudadanía. EN: Esperanza Joven, Nº 13, Instituto de Pastoral y
Desarrollo Juvenil, Lima
CONFERENCIA EPISCOPAL PERUANA
1992 Jóvenes: Cristo los ama, Cristo los llama, Cristo los envía.
Lima.
CONFERENCIA
EPISCOPAL PERUANA
1995 Jóvenes caminos del
desarrollo. Texto base de la Campaña Compartir. Lima.
CONFERENCIA
EPISCOPAL PERUANA
2011 Jóvenes comprometidos
con una vida nueva. Texto base de la Campaña Compartir. Lima
CONSEJO EPISCOPAL LATINOAMERICANO – CELAM
2000 El Tercer Milenio como desafío pastoral,
Santafe de Bogotá, cuarta edición.
CONSEJO ESPICOPAL LATINOAMERICANO - CELAM
2003 Proyecto de vida: camino vocacional de la Pastoral Juvenil.
Sección de Juventud del, Santafé de Bogotá.
COMISION EPISCOPAL DE JUVENTUD
2006 Marco de Referencia
de la Pastoral Juvenil
Peruana. Segunda edición. Lima.
CONFERENCIA
EPISCOPAL PERUANA - PASTORAL DE LA MOVILIDAD HUMANA
2006 Migración: signo de los tiempos.
Lima
COMISIÓN EPISCOPAL DE JUVENTUD
2002 Proyecto Nacional de
Formación. Elementos y orientaciones para desarrollar la formación en la Pastoral Juvenil.
Lima
CONSEJO NACIONAL DE LA JUVENTUD
2004 Estado, procesos y desafíos de las
juventudes rurales en el Perú. Lima
CONSEJO NACIONAL DE LA JUVENTUD
2004 Juventud y gobiernos locales.
Espacios y mecanismos de participación. Lima
CONSEJO NACIONAL DE LA JUVENTUD
2005 Lineamientos de
política nacional de las juventudes. Una apuesta para transformar el futuro.
Lima
CONSEJO NACIONAL DE LA JUVENTUD
2006 Plan nacional de la Juventud 2006-2011.
CORTAZAR, Juan
Carlos
1997 La
juventud como fenómeno social. Pistas teóricas para comprender el período
juvenil en el Perú. PUCP, Lima
CRESPO, Luis
frenando
La juventud, un símbolo
de la Iglesia.
Medellín : juventud, n.12. EN: Páginas, n.
DUARTE, Claudio
2001 Juventudes: trampas, pistas y ejes. Centro de Estudios y
Publicaciones , Serie: Jóvenes: Construyendo nuestro tiempo,
No 16
EGUSQUIZA, Rafael
1999 Jóvenes
y pastoral a puertas de jubileo. EN: Cuadernos de espiritualidad No 88, Centro
de Espiritualidad Ignaciana, Lima, Perú
EGUSQUIZA, Rafael y ZEGARRA, Felipe
1999 Grupos
juveniles y compromiso cristiano. Centro de Estudios y Publicaciones ,
Serie: Jóvenes Construyendo nuestro tiempo, Lima
ENCINAS, Sara
2007 Historias para ser
contadas. Jóvenes rurales
haciendo camino. Juventud Agraria y Rural Católica.
MONTEMAYOR, Carlos
2009 Apuntes para una
Pastoral Juvenil Rural. Informe de investigación. IPADEJ.
GARCIA, Joaquín
1994 Constelaciones
de los jóvenes. Síntomas, oportunidades, eclipses. Cristianisme i Justicia,
Barcelona.
1998 Convocatoria de Dios en el mundo de los
jóvenes. EN: Selecciones de teología n. 147.
GOMEZ, Gerardo
El joven en el torbellino del tiempo: los medios masivos y la seducción de
lo virtual. EN: La juventud latinoamericana en los procesos de globalización.
Opción por los jóvenes, Eudeba-Flacso.
MARTINEZ,
Javier
1996 ¿Cómo son los
jóvenes?: el “nuevo individuo”. EN: Misión joven No 231
MACASI, Sandro
2001 Culturas juveniles, medios y ciudadanía,
Asociación de Comunicadores Sociales, Lima
LIZARBE, Carmen
1999 Todavía
no somos quienes queremos ser. Construcciones sociales del amor y la pareja en
jóvenes de sectores medios de Lima. En Juventud y Sociedad, PUCP, UP, IEP, Lima.
PANFICHI, Aldo, VARCARCEL, Marcel
1999 Juventud: sociedad y cultura.
PUCP, UP, IEP, Lima.
PRENSKY, Marc
2001 Digital
Natives, Digital Immigrants.
RAMIREZ,J; RIVADENEIRA, J
2006 Discernir el proyecto
de vida. Orientaciones y módulos para acompañar el proyecto de vida de los
jóvenes. Comisión Episcopal de Juventud .
VENTURO, Sandro
1996 Movidas en vez de movimientos. Los
jóvenes limeños de hoy y las inéditas modalidades de su (no-) participación
político-cultural. EN: Flecha en el azul, No 1, CEAPAZ
2001 Contrajuventud. Ensayos sobre juventud y
participación política. Instituto de Estudios Peruanos, Lima
¨ Director
IPADEJ
[2]
Hay que reconocer con humildad y convicción que no hay esfuerzo semejante en
toda América Latina, por lo que representa para los países y el continente la
magnitud de la representatividad de la pastoral juvenil orgánica, aún cuando
seamos conscientes que la Iglesia sufra por el porcentaje cada vez menor de
católicos. Así reconoce la labor de la pastoral juvenil algunos expertos: ¨Reconocer y fortalecer el papel de la Iglesia en su trabajo
con jóvenes. En comparación con el escaso porcentaje de jóvenes afiliados que
exhiben las organizaciones sociales, culturales, gremiales y políticas, los
grupos parroquiales de la Iglesia muestran un significativo número de jóvenes
involucrados en sus actividades¨. Por una zona franca para los jóvenes. Mariana
Llona y Luis Fernán Cisneros. Desco, 1997, Pág. 170
[3] Cf. Joven,
a ti te digo, ¡levántate! Perspectivas sobre los jóvenes en el Nuevo Testamento. Carlos Castillo , CEP,
IPADEJ, IBC. Segunda edición actualizada, 2009; O Divino No Jovem. Elementos
teologías para a evangelização da cultura juvenil. Hilario Dick. IPJ Rede Brasilera
de Centros e Institutos de Juventude. Brasil, 2006.
[4]
Cf. CEPAL (2010). El progreso de América Latina y el Caribe hacia los Objetivos de
Desarrollo del Milenio. Desafíos para lograrlos con igualdad.
[5] Cf.
Iglesia Joven N° 14, Año 7, Octubre 2010. Comisión Episcopal de Juventud.
[6]
La preocupación por construir ¨marcos de referencia de pastoral juvenil¨ en los
países es un proceso que ha ido incrementándose.
[7]
Cf. Lo Divino en el Joven. Reflexiones sobre la teología del joven. P. Hilario
Dick. IPADEJ, 1997.
[8]
Cf. Jóvenes comprometidos con una vida nueva. Texto base de la Campaña Compartir
2011 Conferencia Episcopal Peruana.
[9] Cf.
Aportes para una Pastoral parroquial. Jorge Ramírez, IPADEJ 2008.
No hay comentarios:
Publicar un comentario